viernes, 17 de septiembre de 2010

¡Yo ni estuve allí!

Princesita en motoneta.

Yo no quería oír el concierto de Alondra de la Parra, es más ni quería ver televisión, yo quería algo diferente.

Pero todo me sabía a lo mismo, los tres o cuatro canales que transmitían pasaban el mismo concierto, Espinoza Paz y yo queriendo ver a Alondra de la Parra. No había opciones, que falta de creatividad de las televisoras mexicanas, ¡Hasta el canal 22 pasaba a Espinoza Paz!

Sólo a ratos transmitían algo de Alondra de la Parra, cortado por comerciales, por sesudos comentarios de sus conductores o en el 22 por los comentarios de Jorge F. Hernández quien respondía a las felicitaciones de un televidente: “Aquí está tu Kinky”.

¡Que viva México con sus televisoras Joé!

Pero existe la Radio y si es Pública ¿pos qué?

Ya se veía venir. Desde la invitación a celebrar el grito en “tu segunda casa”, en el Estudio A, las acreditaciones, las juntas para la cobertura, el plan de transmisión, ya se veía venir.

¡Que vivan los productores que nos dan transmisiones espaciales!

No sé cómo estuvo ni quiero veriguarlo, pero uno se entera de cosas pues.

Que se canceló la celebración en tu “segunda casa”. Alguien sugirió que se proyectará un video.

Nuestra productora general no pudo acompañarnos porque está en transmisión espacial pero nos dejó un mensaje grabado…
- Lamento mucho no poder acompañarlos pues como saben ustedes estamos haciendo una transmisión histórica para la Radio Pública, sin embargo quiero agradecerles que estén presentes…
- ¡Xoquianos! Vivan los héroes que nos dieron Radio Pública!
- ¡Viva la Jefa!
- ¡Viva la 20-10!
- ¡Viva Joaquín!
- ¡Viva Pascual!
- ¡Viva Carmen!
- ¡Viva Vespa!

Y en el Estudio A quizás algún despistado de guardia nocturna y Don Fausti como Botarga del Pípila respondiendo los vivas.

Pero eso no pasó.

Lo que si pasó es que el Código de Hípica fue declarado en receso a temprana hora de la transmisión espacial. Es que es “imposible” se argumentó desde una motoneta que circulaba las calles de Reforma y del Centro histórico “¿Como reportera de la Red?”, “¡Sí ándales, así!”

Ya antes en una de las juntas se había sugerido: “no empañar la celebración con problemas menores”, otra raya más para el tigre público.

En el desfile:
Yo vi unos charros que parecían los chocorroles del comercial, Daniela Romo ¿qué hacía allí?, parecía la Reina del Carnaval de Veracruz. ¿Dónde quedó el Coloso? ¿Quién es Espinoza Paz? ¿Qué parte de la identidad nacional dignifica Paulina Rubio? Kukulcán y Quetzalcóatl bien, pero hubo unos delfines y jaguares de cartón que parecían de carnaval de primavera de escuela primaria pública y los indígenas otra vez, nada más como escenografía.

Y el supuesto Quetzalcóatl proyectado sobre los muros de la catedral, joé que parecía más dragón del año nuevo chino y ¿hubo o no silbidos para el Calderón?

Que alguien me lo diga.
Que alguien me diga si hubo o no bicicleta, motocicleta.
Que alguien me diga si lució la manta de la 20-10.
Que alguien informe pues.
Que alguien me diga si apachurraron a la Carota.
Si la Carota apachurro a alguien.
Que alguien me diga porque la Maldita sigue pegando con rolas de hace 20 años.
Que alguien me diga si esto fue “hermoso” o se pareció a “un antro de vicio que visitan los argentinos”.
Que alguien me diga si la nota es que no hubo nota.

Pero al fin, algo distinto.

Rayaba la media noche, el país entero en fiesta, en jolgorio, en huateque, echando tequila, grito y bailada.
O todo lo contrario, nadie quería fiesta, jolgorio, mitote, todos respetaban la ley seca. Era un momento para reflexionar no para perder la noche en celebraciones.

Así que desde la Radio Pública, desde la alternativa real en los medios, desde un rinconcito del cuadrante y también de la red, surgió lo insólito:

Una mesa de análisis sobre los medios públicos.
Si.
A medianoche
El 16 de septiembre.
Si.
El país entero se volcó a escucharla, por fin lo que queríamos, dejémonos de conciertos, de iluminaciones, de cohetes y de cuetes, sentémonos a reflexionar. Pensemos en la importancia de los medios de comunicación públicos. Todos queremos saber más. Apaguemos los televisores, sintonízate la B grande, Reactor, pon en tu laptoptap a la 20-10, guarda silencio, vamos a aprender.

Que alguien me diga si aquí si se acordaron o no del Código de Hípica.
Que alguien me diga qué dijeron los analistas.
Que alguien me diga si alguien recuperó la mesa.
Que alguien me diga si no somos únicos. (Pluralicé porque somos parte del mismo barco ¿que no?)

Viva los productores que nos dan transmisiones espaciales!
Vivan las mesas de análisis de medios públicos a media noche!
Vivan las botargas de Pípila!
Vivan las bicicletas y motocicletas!
Viva Espinoza Paz!
Viva El Coloso!
Viva Vespa!
Viva la 20-10 que ya va a morir!


Y la otra?
Ah no sé. Está en Juárez creo.